Marin Marais, la solemne belleza de la viola da gamba

Marin Marais (1656-1728). Tombeau pour Monsieur de Sainte-Colombe
La Rêveuse
Harmonia Mundi

Nunca está de más revisitar la obra genial de Marin Marais, una figura clave del Barroco francés, y, en concreto, de la creación para viola da gamba, instrumento para el que abrió nuevos caminos llevándolo a las más altas cotas de esplendor. El conjunto La Rêveuse ha dedicado su nuevo trabajo a la obra de este músico, presentándola junto con una de sus influencias, el enigmático M. de Ste Colombe, y con la de su amigo Robert de Visée. 

La Rêveuse fue fundado por Benjamin Perrot y Florence Bolton, y dedica su programación a la herencia artística de los siglos XVII y XVIII. El grupo lleva a cabo regularmente actuaciones por todo Francia en lugares tan prestigiosos como el Théâtre de l’Athénée y el Auditorium de Radio France en París, el Scènes Nationales de Orléans, Blois y Quimper, y el Théâtre National Populaire de Villeurbanne de Lyon. La discografía del ensemble incluye volúmenes dedicados a la música barroca inglesa, así como una interesante introducción a la obra de Louis de Caix d’Hervelois, uno de los alumnos aventajados de Marin Marais. 

Marin Marais en un raro caso de progreso social en la sociedad estamental del Antiguo Régimen en Francia. De ser el hijo de un zapatero de abundante descendencia y escasos ingresos, pasó a formar parte de la corte de Luis XIV y a convertirse en uno de los mejores compositores para viola da gamba de todos los tiempos.  

Marais entró como niño de coro en Saint-Germain-l´Auxerrois gracias al tráfico de influencias que ejerció un tío suyo doctor en teología. Allí ya destacaba en la interpretación del clavecín y del laúd, pero lo que realmente atrajo su atención fue la viola da gamba. Al abandonar Saint- Germain-l´Auxerrois, Marin Marais se convierte en discípulo, aunque por breve tiempo, de Monsieur de Sainte Colombe, un músico de moda perteneciente, junto a Monsieur de Machy, a la segunda generación de gambistas franceses. El caso es que a los seis meses de iniciar la relación Sainte Colombe da por finalizadas las lecciones, según él porque ya no tenía nada que enseñar a Marais, aunque los historiadores malintencionados defienden que temía verse pronto superado en técnica por su brillante alumno. 

A pesar de que no nos ha llegado nada de la personalidad de Monsieur de Sainte Colombe, ni prácticamente los hechos de su vida, sí que conocemos su extensa obra. Los sesenta y siete Concerts à deux violes esgales y las más de ciento setenta piezas para viola solista de siete cuerdas le convierten en el más prolífico compositor para este instrumento anterior a Marais. De lo poco que se sabe de él parece ser cierto que vivía bastante apartado de la sociedad en su casa de Saint-Germain l’Auxerrois, París, y que era de natural modesto y reacio a recibir honores y homenajes. En su obra de 1732 Le Parnasse Francais, Evrard Titon du Tillet relata que Sainte-Colombe era aficionado a ofrecer recitales en los salones de su propia mansión, en los que dos de sus hijas le acompañaban a la viola da gamba. 

El tercer protagonista del disco de La Rêveuse es Robert de Visée, afamado cantante y compositor de laúd, guitarra y tiorba, y violagambista. Trabajó como músico de cámara en la corte de Luis XIV, y escribió dos libros de música que contenían doce suites para guitarra, además de algunas suites para tiorba y laúd. 

En la grabación del disco han intervenido Florence Bolton y Emily Audoin, en las violas da gamba, Benjamin Perrot, tiorba y guitarra barroca, y el teclista Carsten Lohff.